Pablo Abia
Pablo es un joven catequista de la Parroquia Cristo Redentor y estudiante de Ingeniería Industrial, aquí nos da su testimonio.
¿Por qué eres cristiano?
Desde pequeño mis padres me enseñaron a rezar, me hablaron de Dios y de la Biblia y me animaron a formarme como cristiano. Y es algo que les agradezco.
Con los años he ido conociendo a Jesús junto a otros jóvenes y a través de amigos como José Manuel, mi sacerdote, y mis catequistas, quienes me han enseñado mucho. He aprendido qué significa ser cristiano en el día a día y serlo me hace feliz, por eso creo que es una parte importante de mí.
¿Qué es para ti tener fe?
Yo creo que se puede tener fe en muchas cosas.Para mí, se trata de creer en algo que no se conoce con certeza, pero es capaz de alimentar con fuerza nuestra voluntad de conseguirlo. La fe en Cristo es lo que me a mí me impulsa a estar cerca de quien me necesita y a quererle, porque eso me acerca a como Él fue. Y al contrario que otras, la fe cristiana no te defrauda.
¿De qué manera practicas tu relación con el Señor?
Como cristiano, participo en mi comunidad parroquial de Cristo Redentor, donde soy catequista. Es un gesto muy sencillo de servicio al Señor y una forma de compartir la fe con jóvenes como yo. Y para cualquier cristiano es central la Eucaristía porque da sentido a todo lo demás. Como la oración. Sacar un rato para leer el evangelio ya significa acordarte de Dios.
¿Crees que se puede compaginar ser un joven adolescente con ser un joven cristiano?
Por supuesto que es compaginable. No es como el agua y el aceite. De hecho, ser cristiano te da una madurez muy positiva para entender los cambios que se producen en uno cuando se atraviesa esa edad tan maravillosa. Y no se trata de ser un aburrido, todo lo contrario ¿Quién ha dicho que si eres cristiano no puedes pasártelo en grande con tus amigos?
Tú has participado en alguna de las actividades de la diócesis ¿Por qué te has animado a hacerlo? ¿Que ha supuesto para ti?
La primera actividad en la que participé con la diócesis fue inolvidable, porque fue la JMJ de Madrid, en la que conocí a buenos amigos y marcó un antes y un después en mi vida como cristiano.
Después, he participado en algunas oraciones con otros jóvenes de la diócesis y en concentraciones como la que hicimos en Ciudad Rodrigo hace dos años con motivo de la JMJ de Río de Janeiro y que también fue una experiencia genial. Se traban buenas amistades y se comparten buenos momentos.
Por último, ¿qué dirías a otros jóvenes que están indecisos?
Les diría que aprovechen la oportunidad de participar en alguna actividad de la Pastoral Juvenil, porque conocerán a jóvenes con las mismas inquietudes, harán amigos, se lo pasarán muy bien y crecerán en Cristo.
@PabloAbiaMoran